Los tés poseen polifenoles que reducen el daño muscular, la inflamación y el estrés oxidativo causado por realizar ejercicio de alta intensidad.
Es normal que después de una sesión intensa de ejercicio sintamos dolor o fatiga en nuestros músculos y probablemente al día siguiente no demos nuestro 100 porque estemos cansados, y este sentimiento puede durar de 24 a 96 horas. Para ello existen diversas formas de contrarrestar el malestar y el dolor por ejemplo tomar antiinflamatorios y antioxidantes naturales como “té verde” y “té negro”.
Los tés poseen polifenoles (componentes activos) los cuales se han evidenciado que por sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes aparte de tener un efecto benéfico en enfermedades como cáncer, diabetes y enfermedades cardiovasculares1, también reducen el daño muscular, la inflamación y el estrés oxidativo causado por realizar ejercicio de alta intensidad3,4.
En lo que corresponde al té verde, las catequinas son sus principales polifenoles, mayormente la epigalocatequina-3-galato. Se ha evidenciado que sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias tienen un impacto positivo en tejidos cerebrales y en el músculo, mostrando que tiene la capacidad de reducir el daño muscular durante la recuperación del ejercicio1,2,3. Esto fue sustentado con estudios de sangre a personas que realizaron actividad física, pues al término de la actividad sus niveles de creatina quinasa (CK) se encontraban elevados, lo cual es un indicador de que las fibras musculares se encuentran dañadas por el ejercicio. No obstante, las personas a las que se les suplementó con té verde tenían niveles bajos de CK mostrando que el daño muscular se disminuye al suplementar con té verde. Asimismo, el tener niveles bajos de creatina quinasa brinda una sensación de menor esfuerzo a persona a la hora de realizar ejercicio pues niveles bajos de CK da pauta a que haya resíntesis de ATP (energía). Para lo que concierna al té negro, dentro de sus polifenoles se encuentran las teaflavinas1 las cuales son antioxidantes que aminoran en estrés oxidativo post-ejercicio; asimismo se ha demostrado que disminuye la liberación del cortisol. Al reducir el daño muscular y el estrés oxidativo también se va a ver reflejada una disminución en la inflamación.
A pesar de que es necesario tener esta inflamación y radicales libres para que el cuerpo se adapte al ejercicio, la constante inflamación puede agravar lesiones musculares, tardar más tiempo en regenerar células musculares y aumentar la producción de especias reactivas de oxígeno (ROS por sus siglas en inglés)4 dando pie a que las funciones y componentes de las células como proteínas, lípidos y DNA se dañen. Además, una recuperación pronta promueve a tener mejor rendimiento, entrenar con mayor frecuencia y con calidad en el entrenamiento.
Referencias
1. Khan, N., Mukhtar, H., (2018). Tea Polyphenols in Promotion of Human Health. Pubmed. Recuperado de https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/30585192/
2. Ohishi, T., Goto, S., et al. (2016). Anti-inflammatory Action of Green Tea. Pubmed. Recuperado de https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/27634207/
3. da Silva, W., Machado, A., et al. (2018). Effect of green tea extract supplementation on exercise-induced delayed onset muscle soreness and muscular damage. Pubmed. Recuperado de https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/29746891/
4. Arent, S., Senso, M., et al. (2010). The effects of theaflavin-enriched black tea extract on muscle soreness, oxidative stress, inflammation, and endocrine responses to acute anaerobic interval training: a randomized, double-blind, crossover study. Pubmed. Recuperado de